Terremoto de 5,8 y réplicas de hasta 6 grados azotan Christchurch en Nueva Zelanda.
Pasado
el medio día un terremoto 5,8 grados de poca profundidad seguido de
réplicas entre 4,0 y 6 grados en la escala de Richter azotaron la ciudad
de Christchurch, en la región de Canterbury de Nueva Zelanda,
causando pánico en la población que también sufrió a inicios del 2011,
un gran terremoto que desestabilizó gran parte de los terrenos de la
ciudad de Christchurch dejándolos inhabitables.
Según el Servicio de Geología y Sismología de Estados Unidos (USGS), los últimos sismos de Nueva Zelanda que afectan a la zona de la ciudad de Christchurch con un epicentro a sólo 18 km de la ciudad son:
5,8 grados Richter, Coordenadas 43,4 S y 172,9 E, 4,7 profundidad, a las 13:58 hora local
5,3 grados Richter, coordenadas 43,4 S y 172,9 E, a 3,7 km profundidad, a las 14:06
4,2 grados Richter, coordenadas 43,5 S y 172,9 E, a 5,0 km de profundidad, a las 14,30
4,0 grados Richter, coordenadas 43,5 S y 172,9 E, a 11,2 km de profundidad. A las 14:41
5,9 grados Richter, coordenadas 43,5 S y 172,8 E, a 4,9 km de profundidad, a las 15:18
Registrado como 6,0 por el Centro Sismológico de Nueva Zelanda.
4,8 grados Richter, coordenadas 43,5 S y 173 E, a 8,4 km de profundidad, a las 16:50
Registrado como 5,0 en Nueva Zelanda.
Residentes de Christchurch y de sus alrededores declararon a Radio Nueva Zelanda
Brian que la gente había comenzado a superar los terremotos anteriores,
pero que este, por las fechas navideñas será muy crítico para muchos.
"Esto
ha llegado en un momento muy desafortunado, en que todo el mundo estaba
empezando a pensar que tal vez había visto el último de ellos. Ahora,
estamos de retorno al punto de partida, creo", señaló Brian Cornualles.
"Acabamos
de tener el viento eliminado de nuestras entrañas. Para ser honesto, no
sé si voy a vivir aquí el año que viene", exclamó Daniel O'Regan de
Rewood. "Era una hermosa mañana encantadora - y todo se va al infierno
otra vez".
Explicó
que a causa de los anteriores terremotos su casa está casi lista para
la reconstrucción, que tiene una hipoteca y está preocupado por el
alquiler de su propiedad.
Paul
Riley contó a la radioemisora que había quedado atrapado en el piso 12
de un edificio central de la ciudad durante el terremoto del 22 de
febrero, y que después de estas últimas sacudidas le tocó ayudar a hacer
la limpieza de la licuefacción en la casa de un amigo.
Dijo
que ahora llegarán los problemas, tales como los seguros. "Sólo
queremos un cierto grado de certeza sobre a dónde vamos en el futuro."
Sumner
residente Tim Murdoch dijo que la gente está harta de los temblores,
aunque no está pensando en dejar de Canterbury por el momento.
Barbara
Scanlon, que vive en las colinas de Scarborough, dijo que podría
planear mudarse a la Bahía de las Islas. "Va a ser cuestión de tratar de
vender la primera casa, y ¿Quien va a querer comprar una casa en
Christchurch?", informó Radio NZ.
El
columnista Joe Bennett dijo a la radioemisora, que a pesar de que su
casa está en una región evaluada con ofertas de evacuación por parte de
las autoridades, el permanecerá en el lugar, en la ladera en Lyttelton.
La
mayoría sintió que la réplica de magnitud 6 de hoy se sentía muy
cercana y muy poco profunda, similar a la del terremoto de febrero.
Tras
los sismos, el medio informativo TVNZ señaló que la población se
prepara para las réplicas, mientras que el alcalde de Christchurch
Ngaire Button, alertó a la Defensa Civil, quienes están evaluando el
total de los daños
El
Ministro Gerry Brownlee viajó a la ciudad para evaluar los daños e
informó que estos son menos que el 13 de junio, cuando un sismo 6,3
azotó a la ciudad.
El
ministro declaró a los medios de prensa que cree que los daños de hoy
serían cerca de 390 a 40% de los causados en junio y que no es de
extrañar que se haya producido nuevamente el fenómeno de licuefacción,
según TVNZ.
En
una visión preliminar se observa que la catedral de la ciudad es lo que
más daño ha sufrido y la licuefacción está afectando más que nada a los
suburbios de Bexley, al igual que tras la réplica de septiembre, señaló
el ministro.
En los primeros minutos, al menos 20 víctimas llegaron a los hospitales sin que se registraran heridos graves.
fuente del texto/La Gran Época
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